Como todas las plantas, las orquídeas necesitan un trasplante, y éste debe hacerse correctamente.
En este artículo, le explicaremos las precauciones que debe tomar y el procedimiento que debe seguir para trasplantarlas sin errores.
¿Cuáles son los componentes del sustrato ideal para las orquídeas?
Los componentes del sustrato de una orquídea contribuyen en gran medida a mejorar la circulación del aire y el drenaje.
La corteza es el principal material del sustrato. La madera de abeto es porosa y gruesa.
La fibra de coco es un material estéril que absorbe la humedad sin impedir el drenaje del agua.
El agrile expandido es la materia prima que garantiza el drenaje del agua.
El musgo de turba Sphagnum tiene una estructura porosa que garantiza la retención del agua.
Para crear el sustrato perfecto para sus orquídeas, mezcle 2 partes de corteza con 1 parte de musgo Sphagnum, 1 parte de fibra de coco y 1 parte de arcilla.
¿Cuándo hay que cambiar la maceta?
Es cierto que algunas variedades de orquídeas crecen muy despacio. Pero la mayoría de estas plantas se compran en una maceta muy estrecha. En esta maceta, las raíces entran en contacto con los lados de la maceta y el crecimiento puede ralentizarse.
Si notas que la corteza se desmorona o se vuelve impermeable, es hora de trasplantar.
¿Cuáles son las 3 etapas para trasplantar con éxito?
Para que esta etapa esencial en la vida de su orquídea sea un éxito, debe seguir estos 3 pasos supersencillos.
Preparar la orquídea
Sumerja la orquídea en agua caliente para ablandar las raíces. De esta forma también se elimina la mezcla de las raíces.
Una vez hecho esto, podrá manipular su planta sin dañar las raíces.
Limpieza del sistema radicular
Si el sustrato se ha deteriorado, es posible que las raíces estén secas y podridas. Para ello, elimine las raíces secas y podridas de todo el sistema radicular con unas tijeras totalmente desinfectadas.
Por otro lado, deja las raíces grisáceas o verde brillante. Basta con desinfectarlas con una solución fungicida.
Colocar la orquídea en una maceta
Vuelva a colocar la orquídea bien limpia en la maceta, teniendo cuidado de no doblar las raíces. A continuación, cúbralas con la mezcla preparada sin compactar demasiado.